
La educacion segun aristoteles
Contenidos
Contribución de la filosofía a la educación
Aristóteles (384 – 322 a.C.). La obra de Aristóteles fue muy amplia, pero nuestro conocimiento de él es necesariamente fragmentario. Sólo se ha conservado un 20% de su obra escrita, y gran parte de ella es en forma de conferencias y otros apuntes. Sin embargo, no se puede dudar de su importancia. Lo fue:
Un erudito incansable, cuyas exploraciones científicas fueron tan amplias como profundas fueron sus especulaciones filosóficas; un profesor que inspiró -y sigue inspirando- a generaciones de alumnos; una figura pública controvertida que vivió una vida turbulenta en un mundo turbulento. Se impuso en la antigüedad como un coloso intelectual. Ningún hombre antes de él había contribuido tanto al aprendizaje. Ningún hombre después podría esperar rivalizar con sus logros
Sólo existen fragmentos de su obra Sobre la educación, pero podemos hacernos una idea de sus ideas a partir de las obras que han sobrevivido. Aristóteles creía que la educación era fundamental: la persona realizada era una persona educada. Aquí quiero centrarme en los elementos de su pensamiento que siguen desempeñando un papel clave en la teorización de la educación informal.
Aristóteles y el desarrollo infantil
Aristóteles, filósofo y científico griego, nació en Estagira, una ciudad de Calcídica. A los diecisiete años entró en la escuela del filósofo griego Platón, donde permaneció durante veinte años. Tras la muerte de Platón en el año 348 a.C., Aristóteles enseñó filosofía, primero en Atarneus, en Asia Menor, y luego en Mitilene, en la isla de Lesbos. Luego fue tutor de Alejandro Magno en la corte de Macedonia. En 335 ó 334 a.C. regresó a Atenas y fundó una escuela llamada Liceo.
Los primeros escritos de Aristóteles fueron diálogos inspirados en los ejemplos de Platón; algunos han sobrevivido en forma fragmentaria. El cuerpo principal de los escritos que han llegado hasta nosotros consiste en tratados sobre una amplia gama de temas; probablemente se presentaban como conferencias, y algunos pueden ser notas de conferencias tomadas por los estudiantes. Estos tratados quedaron en desuso en Europa Occidental tras el colapso del Imperio Romano en el siglo VI de nuestra era, hasta que fueron recuperados en la Edad Media y estudiados por pensadores musulmanes, judíos y cristianos. El gran alcance de los tratados, junto con el extraordinario intelecto de su autor, le valió a Aristóteles el título de “maestro de los que saben”.
Platón sobre la educación
La filosofía de la educación es la rama de la filosofía aplicada que investiga la naturaleza de la educación, así como sus objetivos y problemas. Incluye el examen de las teorías educativas, los presupuestos presentes en ellas y los argumentos a favor y en contra. Es un campo interdisciplinar que se inspira en varias disciplinas tanto dentro como fuera de la filosofía, como la ética, la filosofía política, la psicología y la sociología. Estas conexiones se reflejan también en la importante y amplia influencia que la filosofía de la educación ha tenido en otras disciplinas. Muchas de sus teorías se centran específicamente en la educación en las escuelas, pero también abarca otras formas de educación. Sus teorías suelen dividirse en descriptivas y normativas. Las teorías descriptivas dan cuenta de lo que es la educación y cómo entender sus conceptos fundamentales, en contraste con las teorías normativas, que investigan cómo debe practicarse la educación o cuál es la forma correcta de educación.
Estudiante de Aristóteles
Las virtudes intelectuales representan rasgos de carácter como ser capaz de juzgar la verdad del asunto y comprender la naturaleza de las cosas, mientras que las virtudes morales son hábitos de vida que implican a toda la persona e incluyen la justicia, la templanza, la prudencia y la fortaleza, donde se caracterizan por el deseo y la emoción (Aristóteles, 1984). Aristóteles explora estas ideas en La Ética de las Nichomaquias, un texto que consta de diez libros y desde donde sostiene que “El hombre que ha de ser bueno debe estar bien formado y habituado” (Aristóteles, 1984; p. 11). La felicidad para Aristóteles sólo puede ser accesible a través de la educación siendo ésta la piedra de toque de la ética aristotélica con las virtudes, la sabiduría y la felicidad adquiridas a través de ésta (Curren, 2000). Para Aristóteles, la virtud se consigue cuando se obtiene la felicidad o la bondad, y la bondad abarca dos categorías: la bondad del intelecto y la bondad del carácter (Curren, 2000). La bondad del intelecto puede mejorarse a través de la educación y es el resultado de la formación y la experiencia, mientras que la bondad del carácter se produce por el hábito, que se puede crear manteniendo buenas costumbres (Curren, 2000).
Relacionados

Bienvenido, soy Alicia Múñiz. En mi blog encontrarás diversas noticias y novedades para que estés informado.